El próximo miércoles 29 de mayo serán finalmente inhumados en Graus los restos de don José Salamero Martínez, fallecido repentinamente en Madrid en 1895, a la edad de 60 años.
El acto comenzará en la iglesia de San Miguel, a las 19:30 horas, con el oficio religioso dirigido por el párroco Juan Ignacio Cardona. Acto seguido, en torno a las 20:15 horas, los restos serán definitivamente inhumados en el cementerio municipal de Graus, en una sepultura habilitada al efecto. El acto incluirá el canto de dos albadas, a cargo de Jacinta Trell, que estará acompañada a la gaita por Javier Aguilar.
José Salamero Martínez nació en Graus en 1835. En su juventud pasó por Pamplona, Madrid y Roma, donde hizo carrera pontificia. Con treinta años se asentó en Madrid, llegando a ser Académico de Ciencias Morales y Políticas, y miembro del Consejo de Instrucción Pública. Fue también autor eclesiástico y director de las revistas La Lectura Católica y La Controversia y del periódico El Espíritu Católico. También dirigió en Madrid los colegios de Santa Isabel y del Ángel de las Escuelas, en los que incorporó a sus brillantes sobrinos Joaquín Costa Martínez y Andrés Martínez Vargas, dos de los muchos jóvenes para los que fue cicerone y mecenas en la capital. En Graus costeó y fundó en 1890 una pionera Escuela de Artes y Oficios, lo que le mereció un multitudinario homenaje popular el 19 de marzo de 1891, para el que también se le compuso un himno y se le dedicó la calle que aún hoy lleva su nombre. En 1929, el escultor José Bueno realizaba el busto que se encuentra en el acceso del santuario de La Peña.
José Salamero falleció en Madrid, repentinamente, por un infarto cerebral, el 30 de diciembre de 1895. Su sobrino Antonio Ibor se encargó de sus exequias, aunque algunas de las personalidades más influyentes del momento en Graus, como Joaquín Costa o Laureano Ducay, desearon inmediatamente trasladar sus restos a Graus, para lo que incluso se bocetó un mausoleo.
En los últimos meses, ciento veinticuatro años después del fallecimiento de mosén Salamero, desde el Área de Cultura del Ayuntamiento de Graus se ha conseguido localizar su sepultura en el madrileño Sacramental de San Justo, y tramitarse los permisos que han posibilitado la exhumación y traslado a Graus de estos restos, providencialmente, puesto que la sección en la que se encontraban ha sido recientemente demolida y trasladados esos enterramientos a una fosa común.
El acto está abierto a todos cuantos quieran participar de este homenaje a una de las figuras más relevantes de la historia contemporánea de la localidad.
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