El Museo Diocesano Barbastro-Monzón es «digno de hacerle una visita» pese a las 24 piezas depositadas en Lérida. Así lo aseguró su director y «alma mater» del espacio, Enrique Calvera, quien participó el pasado viernes en el primer Consejo de Sabios de Graus de este año en compañía de la subdirectora del mismo, Maite López. El consejo se completará con una visita organizada por el Área de Cultura del Ayuntamiento a dicho espacio museístico, prevista para el 22 de marzo.
El Consejo de Sabios constituyó un repaso del patrimonio de Graus y Ribagorza a través de la colección del Museo Diocesano de Barbastro-Monzón, así como una aproximación al propio museo. Enrique Calvera, quien confesó sentirse muy a gusto en Graus porque allí comenzó su vida pastoral, expuso la trayectoria del museo desde que comenzó a plantearse la idea, y hasta su apertura el pasado mes de diciembre. En su recorrido por las distintas etapas del museo, el director repasó los pueblos que se han ido despoblando, la actuación de los distintos obispos que han intervenido en este proceso e incidió especialmente en dos personas que «han tenido mucho que ver en que el museo se convirtiera en una realidad», Santos Lalueza y Manuel Iglesias.
Pese a las 24 vitrinas vacías a la espera del regreso de los bienes depositados en Lérida, Enrique Calvera prefirió no abordar el tema para no darle «tanta importancia». Sí que aprovechó para recomendar la visita a este «importante» espacio que tiene vocación de «puertas abiertas».
La colección del Museo Diocesano de Barbastro-Monzón, de la que forman parte 300 piezas de alto valor histórico y artístico de las comarcas orientales de la provincia de Huesca, cuenta con un buen número de obras procedentes de Graus y Ribagorza. Maite López, en su intervención, realizó una visita virtual por el museo a través de dichas piezas ribagorzanas. La subdirectora del museo barbastrense resaltó piezas como el San Juan Bautista de Bisaurri, una tabla manierista del siglo XVI, o las pinturas murales de Pano.
Desde su apertura el pasado mes de diciembre, la afluencia de visitantes en el Museo Diocesano Barbastro-Monzón ha sido buena, sobre todo de grupos procedentes de Zaragoza. «Estamos contentos, pese al frío y la crisis económica que han incidido negativamente», apuntó López, quien invitó a sumarse a la excursión del próximo martes y recordó que los horarios de apertura son de 10 a 13 horas y de 16 a 19 horas de martes a domingo.
Fuente: Diario del AltoAragón. Elena Fortuño.